Juan Francisco Artiles Carreño | OPINION

La (ausencia de) Transparencia en el gobierno de Telde

Aunque algunos políticos han convertido la Transparencia en un fin en sí mismo y se pasan el día presumiendo de lo transparente que es su acción de gobierno, lo cierto es que la Transparencia es un instrumento, entre otros, para cumplir con el derecho que tenemos los ciudadanos para conocer cómo se gestionan los asuntos y problemas que nos afectan a todos. Y además sirve para hacer más difícil los comportamientos corruptos que con tanta facilidad están creciendo en España.

Los miembros del gobierno municipal presumen de transparentes en cada comparecencia pública ante los medios de comunicación, es decir, todos los días. Pero la realidad es que el Ayuntamiento de Telde está volviendo a los mejores (peores) días de los gobiernos encabezados por el PP. Sirvan dos ejemplos para ilustrar esta situación.

El gobierno de la señora Hernández ha publicitado, con los titulares y fotos acostumbrados, el nuevo portal municipal en internet, la nueva página web del ayuntamiento. Pero cuando un ciudadano entra en ella se encuentra que las actas de los Plenos de 2016 no están. Ya estamos en junio y no hay ningún acta de Pleno del presente ejercicio.

¿Será que la señora interventora está depurando las actas? Como toda la responsabilidad recae sobre ella.

Pero que el ciudadano no desespere. Las actas de las Juntas de Gobierno están más o menos actualizadas hasta el 11 de mayo de 2016. Tanta oscuridad como si no estuviera. Como las Juntas de Gobierno no son públicas las actas se publican resumidas. Tan resumidas que el contenido de las propuestas ni aparece.

Seguro que los vecinos interesados en los asuntos municipales y en lo que el gobierno hace, se queda tranquilo y perfectamente informado por este alarde de transparencia.

Veamos el segundo ejemplo, ahora del área económica. Aquí la oscuridad aún es mayor y más grave, por tratarse del dinero de todos los vecinos.
La Ley de Haciendas Locales obliga a la señora Hernández, a liquidar el presupuesto de 2015 antes del 1 de marzo de 2016 previo informe de la Intervención General. Lo lógico en un gobierno que tanto presume de transparencia es que antes de esa fecha la liquidación hubiera estado colgada en ese nuevo portal de internet del Ayuntamiento o, como mínimo, al alcance de los grupos de la oposición que seguimos a la espera de los documentos para así poder contrastar lo conocido a través de los medios de comunicación.

Pero no. También aquí nos hemos encontrado una rueda de prensa con titulares y fotos donde la señora Alcaldesa y la responsable del área económica, con 3 meses de retraso sobre el plazo legal, han podido hablar de lo mal que han hecho las cosas los gobiernos anteriores, por cierto de los que ellas también formaron parte, y los problemas que causa permanentemente la señora interventora en la gestión económica del ayuntamiento. No hay que olvidar que nada más tomar posesión, la señora Hernández la calificó como la representante de la troika que tiene intervenido al Ayuntamiento de Telde.
Lo único cierto es que el gobierno municipal impide que los vecinos podamos conocer la marcha económica del ayuntamiento en tiempo y forma tal y como exige cualquier comportamiento democrático, ajustado a las leyes de transparencia y a lo firmado en el pacto de Gobierno.

Por su parte, si damos por bueno lo publicado, la misma Ley de Haciendas Locales, dice que cuando un presupuesto se liquida con remanente de tesorería negativo, "el Pleno de la corporación deberá proceder, en la primera sesión que celebre, a la reducción de gastos del nuevo presupuesto por cuantía igual al déficit".

Lo cual quiere decir que en el pasado Pleno del 3 de junio, entiendo, se debió aprobar la reducción de gastos en el presente ejercicio de 2016 por importe de ¿35 millones de euros? Pero claro, si no se dio cuenta al Pleno de la propia liquidación de cuentas de 2015, como marca la Ley, ¿Cómo se iba a cumplir con lo otro?

Pero en su afán de transparencia el gobierno municipal se ha vuelto a saltar la "dichosa Ley" dedicando el Pleno a fuegos de artificio, vía mociones, secundado por el PP para presumir sobre gestión municipal bien hecha o él y tú más.

Esta es la realidad del gobierno municipal que encabeza Nueva Canarias que, en vez de construir Transparencia gobernando con eficacia, se pierde en fotos y titulares mientras lo único que brilla es la falta de gestión y la oscuridad, nuevamente, se vuelve a convertir en el instrumento político de trabajo diario.

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